Lillard, el referente de la fidelidad a un equipo
Lillard fue seleccionado por los Trail Blazers con la sexta elección del Draft de la NBA de 2012 y desde entonces solo ha vestido esa camiseta en la mejor liga de baloncesto del mundo. Desde su temporada de debut, en la que jugó los 82 partidos de temporada regular, Lillard se convirtió en un líder y un ejemplo a seguir en la franquicia. No sólo por su liderazgo y poder anotador, sino también por el respeto que siempre mostró hacia el público y los miembros de la comunidad.
Damian nació en Oakland, estudió en Utah y vive en Portland desde 2012. Todo ello a una distancia relativamente corta en la costa oeste de Estados Unidos. Algunos miembros de su familia le visitan con frecuencia. Otros decidieron mudarse directamente para estar cerca de la estrella que les guía. El base de los Blazers organiza campus anuales para los jóvenes de la ciudad. Desde su llegada, también ha invertido en el programa Respect, que trabaja con estudiantes de secundaria en tres zonas de Portland: McDaniel, Parkrose y Roosevelt. Lillard ganó el premio mensual NBA Cares Community Assist en tres temporadas diferentes, una marca de su compromiso continuo con los que le rodean.
El 19 de diciembre de 2022, Lillard superó los 18.040 puntos que el legendario Clyde Drexler había convertido con Portland y se hizo con el récord de máximo anotador de la historia del equipo. Esa marca llevaba 27 años en pie, pero Dame se la había marcado como uno de sus objetivos. Y cuando apunta, no falla. “Cuando piensen en los Blazers, quiero que piensen en mí”, dijo Lillard tras aquel logro.
Una semana después, en el Moda Center, su casa, Lillard recibió un merecido homenaje con una gran ovación del público y rodeado de todos sus seres queridos. Aunque Damian juega con el número 0, la camiseta que llevaban sus hijos tenía la frase “My dad is #1”. Nada más cierto.
Cada temporada cuando Lillard sueña que construir un equipo para ser campeones con Portland puede ser sólido, ahí llegan los trades de sus mejores compañeros para echarlo todo abajo y tener la obligación de volver a empezar. LaMarcus Aldridge y CJ McCollum son los máximos ejemplos de jugadores clave que Damian ha visto partir hacia otros horizontes. ¿Será Jerami Grant el siguiente? A estas alturas, el base de los Blazers se ha resignado. Jugará con quien tenga al lado, pero siempre para los Blazers. De hecho, en 2022 amplió su contrato con Portland hasta 2026.
La tendencia marcada por LeBron James cuando dejó Cleveland Cavaliers por Miami Heat para jugar con sus amigos Dwyane Wade y Chris Bosh, formando el trío que iría a por el anillo de campeón y lo ganaría, se extendió por toda la liga. Kevin Durant dejó Oklahoma City Thunder por Golden State Warriors para jugar con Stephen Curry y llegar a lo más alto. Luego, el propio KD se marchó a Brooklyn Nets y fue la pieza clave del trío con James Harden y Kyrie Irving que fracasó estrepitosamente. Y así, sobran ejemplos. Lillard fue tentado en su día por Kawhi Leonard para unirse a él en Los Ángeles Clippers, también por LeBron para unirse a Los Ángeles Lakers y otras ofertas a las que Damian siempre dijo lo mismo: no.
No quiere Lillard ser campeón de la NBA? Claro que sí, pero no a cualquier precio. Quiere conseguirlo con los Blazers. ¿Llegará algún día la hora de Dame? Sólo el destino y el balón tienen la respuesta.
OTRAS ESTRELLAS, ¿EL MISMO CAMINO?
Stephen Curry no sólo comparte con Lillard la facilidad para tirar, con un buen porcentaje de acierto, desde cerca del logo de media cancha. También ha sido fiel al equipo que le abrió las puertas de la NBA. Steph comenzó su idilio con los Golden State Warriors en la campaña 2009-2010 y ahí sigue. Curry ganó cuatro anillos de campeón junto a Klay Thompson y Draymond Green, un trío que se formó a partir de selecciones del draft, como la de Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginóbili en San Antonio Spurs. Tanto Curry como Thompson sufrieron graves problemas de lesiones, pero en ninguna de esas ocasiones los miembros de este trío, con Steph como abanderado, decidieron mirar hacia otro lado.
Giannis Antetokounmpo comenzó su andadura en Milwaukee Bucks en 2013. Su crecimiento fue gradual, pero constante. Cuando ya era una de las estrellas de la NBA, las ofertas le aparecían con más fuerza que sus ataques al aro. Sin embargo, el griego decidió quedarse en los Bucks, donde primero conquistó la gloria individual con dos premios MVP de la temporada regular (2019 y 2020) y luego se coronó campeón en 2021.